Ana Silvia López celebra un siglo de vida

El pasado 4 de agosto Ana Silvia López de Moreno celebró sus 100 años de edad, rodeada de su familia. – Suministrada/GENTE DE CAÑAVERAL
Aunque a veces la memoria suele “jugarle algunas malas pasadas”, a sus 100 años Ana Silvia López de Moreno lucha incansablemente por conservar intactos sus recuerdos.
Y es que sus pronunciadas arrugas y las espesas canas reflejan que los años no han pasado en vano. El pasado 4 de agosto cumplió un siglo de vida.
Mil historias pasan por su mente al hablar sobre su vida; sin embargo, los momentos con su familia se han convertido en la pieza clave para alcanzar la “eterna juventud”. “Me gusta estar activa, siempre he sido muy alegre, me gusta cantar, jugar naipe, aún juego con los hijos, nietos y hasta con los bisnietos. Es importante entregar siempre mucho amor a los que nos rodean”, manifestó Ana Silvia.

Ana Silvia López de Moreno se caracterizó por ser una mujer trabajadora y una madre muy entregada. – Suministrada /GENTE DE CAÑAVERAL
Agregó que tener una alimentación sana y mantener una actitud positiva ante las adversidades, podrían ser el secreto de sus 100 años de existencia.
Es viuda hace 19 años y actualmente disfruta cada momento con su numerosa familia conformada por 7 hijos, 12 nietos, 6 bisnietos y una tataranieta.
Algunos recuerdos
La mujer recuerda que su juventud “fue una época dura, imperaba la división de los conservadores y liberales, no se podía decir de qué partido político era uno porque era grave, vivimos y hemos vivido años de violencia. Pero creo que la muerte del líder político Jorge Eliécer Gaitán marcó en Colombia otro rumbo, y fue el inicio de un periodo sangriento en la historia de este país”.
Se casó a los 23 años con Pedro Emilio Moreno, de 27 años, en Cepitá, a las 5:00 a.m. “Nos casamos a escondidas, por eso no tenemos registros fotográficos, solo lo que quedó en el corazón. Era una época en la que las familias se oponían a las relaciones concertadas, por eso Pedro y yo tomamos esa decisión y nos casamos como estábamos vestidos, sin preparativos ni trajes especiales, luego de eso él se fue porque tenía que trabajar, era Policía, yo no quise irme con él, me quedé en la casa y volvió al año y ya nos fuimos a vivir juntos”, remembró la mujer.
Agregó que uno de los momentos más tristes de su vida fue la partida de su amado esposo, con quien compartió 58 años: “fue como el padre nos dijo: hasta que la muerte los separe”.
El nacimiento de cada uno de sus hijos ha marcado su vida como mamá y como mujer, “aún están a mi lado, nunca me han abandonado, siempre he estado acompañada por ellos. Me abrazan, me besan, me hacen cariños. El mayor tiene 73 años, y el menor, 61”
Aseguró que toda su vida se caracterizó por ser una mujer muy trabajadora, pero su pasión siempre fue la alta costura, oficio en el que se desempeñó gran parte de su vida para ayudar a sacar a sus hijos adelante. Hoy, al celebrar sus 100 años, su mayor deseo es que cada uno de sus descendientes goce de buena salud, amor y mucha felicidad.