El placer de un delicioso chocolate
¿Quién no se ha dejado seducir por el delicioso sabor de un chocolate? En todas sus presentaciones: en barras, bombones, con trufas.
Solo basta destaparlo para dejarse envolver por su forma y aroma, al tacto, al gusto, a la vista. Con todos los sentidos se puede disfrutar de un chocolate. Y para esta ocasión Gente quiere llevarlo por ese viaje, con la ayuda de un experto en chocolatería belga, país que se lleva grandes créditos por tener sus mejores chocolates.
Así que comience este placentero viaje con un producto que se lleva el título de la felicidad.
¿Qué magia esconde un chocolate?
El chocolate, además de ser producto tradicional y delicioso trae felicidad. Los cincos sentidos son fundamentales a la hora de distinguir las propiedades de un producto.
A continuación Louis Collinet, mánager de Chocolates Joséphine explica las características que debe tener un buen chocolate. Éstas pueden ser detectadas fácilmente.
A la vista: Debe verse brillante, tener coloración uniforme y estar libre de estrías, grietas y burbujas de aire.
Al tacto: Debe ser delgado para que pueda derretirse en la mano a temperatura corporal.
Al olfato: Los aromas de un buen chocolate persisten incluso después de saborearlo. Se puede detectar su olor antes de comerlo o exhalando aire después de haberlo probado. Entre más olor perciba, mejor es el producto.
Al oído: Debe crujir al partirse. Si es difícil de romper está demasiado ceroso. Si se astilla está demasiado seco.
Al gusto: Se deben percibir sus sabores distribuyéndolo por toda la boca y permitiendo que se derrita al alcanzar la temperatura corporal. Esto se hace para estimular las papilas gustativas que deben sentir sobre todo el cacao.
