El voto programático
La ley 131 de 1994 entiende por Voto Programático el mecanismo de participación mediante el cual los ciudadanos que votan para elegir gobernadores y alcaldes imponen como mandato al elegido el cumplimiento del programa de gobierno que haya presentado como parte integral en la inscripción de su candidatura.
Esto obliga a los gobernantes a convertir sus propuestas de campaña en Planes de Desarrollo, que son a su vez acuerdos en los municipios y ordenanzas en los departamentos, por lo tanto de obligatorio cumplimiento.
Los colombianos no acostumbramos a leer programas de gobierno, votamos basados en caras y lemas de campaña, por eso solemos dejar las decisiones ciegamente en manos del gobernante electo y posteriormente no tenemos ni los argumentos ni el conocimiento de las herramientas para evitar decisiones que nos perjudican.
El fondo del asunto es que nosotros los ciudadanos para ayudar a construir ciudad o departamento que nos sirva a todos y no a pocos es votar por programas, proyectos e ideas y no por amiguismos o intereses particulares.
Por eso es importante aprender a saber digerir ideas y mostrar que los santandereanos somos defensores y practicantes del voto de opinión y no aceptamos imposiciones.
Antes de votar debemos conocer dicho programa de gobierno, esto ayuda a conocer mejor al candidato y tener razones para evaluarlo.
Creo que las próximas elecciones el voto programático será el mejor aporte que le haremos a Bucaramanga y Santander para sacarlos del marasmo en que están. Votar a conciencia y con sentido común es el verdadero lema del elector.